
Vinos Viñedo el Refugio
Entre creencias ancestrales y alturas místicas
Viñedo El Refugio nació en 2019 como el primer viñedo comercial del Estado de Hidalgo, fundado por un grupo de amigos apasionados —liderados por la enóloga Agostina Astegiano— en San Lorenzo el Chico, Nopala de Villagrán. Concebido como un espacio místico inspirado en la cosmovisión otomí, redefinió el mapa vitivinícola mexicano al asentar sus primeras cepas a 2,240 metros sobre el nivel del mar.
Su origen responde a la fusión de tradición y espiritualidad: aplicando prácticas artesanales —conducción en vaso libre, riego por goteo y vendimia manual— se elaboran tintos y blancos de perfil expresivo y auténtico. Entre sus etiquetas emblemáticas destaca Jamädi, palabra otomí que significa “agradecer”, presente en sus líneas Colombard–Verdejo, Rosado Grenache y Syrah–Cabernet Sauvignon.
Implantado en suelos calcáreos y arcillosos, El Refugio concibe cada botella como un vínculo entre el pasado y el presente, ofreciendo una experiencia enoturística y sensorial que celebra el alma del Valle del Mezquital.
HITOS EN LA HISTORIA DE VIÑEDO EL REFUGIO
- 2019: Fundación de Viñedo El Refugio en San Lorenzo el Chico, Hidalgo, con la primera plantación de variedades tintas y blancas a 2,240 msnm.
- 2020: Primer embotellado de la línea Jamädi Colombard–Verdejo, la primera etiqueta concebida bajo la filosofía otomí de “agradecer”.
- 2021: Presentación del Jamädi Rosado Grenache, que amplía la oferta con un perfil fresco y aromático.
- 2022: Lanzamiento del Jamädi Syrah–Cabernet Sauvignon, con crianza en barrica francesa para mayor estructura y complejidad.
- 2023: Apertura de la Sala de Degustación Mística, un espacio íntimo para catas guiadas que integran rituales y narrativas ancestrales.
- 2024: Reconocimiento en festivales nacionales de vino por la autenticidad y calidad de sus etiquetas Jamädi.
- 2025: Inauguración del Centro de Experiencias El Refugio, que incluye recorridos narrativos, maridajes sensoriales y eventos privados en el viñedo.

PRODUCCIÓN Y ENOTURISMO
Viñedo El Refugio elabora lotes artesanales de vinos tintos —Cabernet Franc, Cabernet Sauvignon, Petit Verdot, Tempranillo, Graciano, Grenache, Pinot Noir, Syrah y Merlot— y blancos —Viognier, Sauvignon Blanc, Colombard, Grenache Blanco y Albariño—, todos cultivados en vaso libre, con riego por goteo y vendimia manual, y criados en barrica para potenciar su expresividad.
Las experiencias enoturísticas se centran en la Sala de Degustación Mística, donde se ofrecen catas guiadas de las etiquetas Jamädi, acompañadas de narrativas ancestrales que reflejan la cosmovisión otomí. Además, El Refugio prepara próximamente recorridos por viñedos, eventos privados y maridajes regionales en su entorno pintoresco del Valle del Mezquital.
La fusión de prácticas artesanales, diversidad varietal y propuestas sensoriales consolidan a Viñedo El Refugio como un destino único de enoturismo en Hidalgo.

Viñedo El Refugio
Los viñedos de El Refugio se asientan en San Lorenzo el Chico, Nopala de Villagrán, Hidalgo, a 2,240 metros sobre el nivel del mar, en pleno Valle del Mezquital. Esta altitud, combinada con un clima semiárido y una amplitud térmica de hasta 15 °C entre el día y la noche, favorece una maduración prolongada de la uva, concentrando aromas y fenoles esenciales.
La fusión de altitud, suelos calcáreos con vetas arcillosas y más de 2,000 horas de sol anuales genera un microclima único que realza la expresión varietal y la finura de cada cosecha.
Factores clave que hacen únicos a los viñedos de El Refugio:
- Altitud privilegiada: 2,240 msnm para preservar acidez y desarrollar complejidad aromática.
- Suelos calcáreos y arcillosos: aportan drenaje natural, minerales y estructura al vino.
- Exposición solar intensa: superior a 2,000 horas al año para una maduración homogénea.

Altitud y Calidad en Cada Copa
Viñedo El Refugio se asienta a 2,240 metros sobre el nivel del mar, en un microclima semiárido del Valle del Mezquital que favorece una maduración pausada y equilibrada de la uva, concentrando compuestos aromáticos y polifenoles esenciales para su carácter expresivo.
La amplitud térmica de hasta 15 °C entre el día y la noche y más de 2,000 horas de sol anuales aseguran una acumulación controlada de azúcares y la preservación de la acidez natural. Los suelos calcáreos con vetas arcillosas refuerzan la estructura y minerabilidad de los vinos, proporcionando cuerpo y finura.
Gracias a este terroir único, El Refugio produce etiquetas capaces de ofrecer equilibrio, complejidad aromática y un perfil sensorial auténtico, apto para competir en escenarios vinícolas nacionales e internacionales.
